Visto bueno de la ANMAT a medicamentos que reduce el tamaño de los tumores de útero
La agencia reguladora aprobó esta semana el uso en la Argentina del ulipristal, un tratamiento que según los especialistas permite reducir en un 80 por ciento el tamaño de los fibromas, ayudando a hacer más sencillas las cirugías. El nuevo fármaco aparece en el país luego de más de dos décadas sin novedades farmacológicas al respecto.
Se cree que en la Argentina una de cada cuatro mujeres tiene un fibroma, el tumor benigno no canceroso más común. La mayoría de las pacientes portadoras de son asintomáticas, y sólo un 20 por ciento requieren tratamiento, por lo general cirugía. Por sus características, cuando se trata suele tener un tamaño importante, y estar en un estado avanzado. Esta semana, se presentó en el país un medicamento que permite reducir el tamaño del fibroma, y así hacer más sencilla la operación. Incluso en algunos casos el tratamiento farmacológico es tan efectivo que no requiere la operación. La aprobación del fármaco rompe con más de 20 años sin novedades en la materia.
Esta semana, las autoridades de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) dieron el visto bueno al uso en el país de ulipristal, un nuevo tratamiento que reduce hasta un 80 por ciento el tamaño de los tumores de útero más frecuentes, llamados “miomas” y conocidos como “fibromas”. Al lograr esta reducción, en muchos casos se hace innecesario operara, y en caso de tener que recurrir a la cirugía, es mucho más sencilla y menos invasiva.
“Ulipristal representa un avance muy importante con respecto a las terapias disponibles, ya que desde hacía 22 años no había novedades contra los mioma”, destacó el ginecólogo Silvio Tatti, quien agregó que dos millones de argentinas lo padecen. “Hoy es un día bisagra en la Argentina, ya que el nuevo fármaco estará disponible la semana próxima en farmacias y mejorará la calidad de vida de millones de mujeres, además de disminuir en un 50 por ciento el índice de cirugías por miomas, lo que tendrá un impacto enorme en el sistema de salud”, dijo el especialista, según el diario El Día de La Plata.
Los fibromas pueden ser asintomáticos o producir síntomas que en algunos casos son tan severos que comprometen la calidad de vida, como sangrado menstrual abundante -que puede generar anemia-, síntomas por compresión de vejiga o intestinal, como deseos de orinar frecuentemente, molestias intestinales y dolor al mantener relaciones sexuales, así como problemas de fertilidad. En los pacientes que no presentan síntomas, por lo general, se llega al diagnóstico en forma casual, por ejemplo al realizarse una ecografía de rutina.
Según datos oficiales, en la población general aparecen en una de cada cuatro mujeres en edad reproductiva, mientras que una de cada dos mujeres de más de 40 años y cuatro de cada 10 de entre 30 y 40 años los padecen. Tatti, quien también es profesor titular de Ginecología de la Facultad de Medicina de la UBA, apuntó que “el mioma uterino es un tumor benigno hormono-dependiente de causa desconocida, aunque se sabe que tiene un importante componente hereditario”. “Ya existían medicamentos como los anticonceptivos hormonales, que mejoraban el sangrado abundante durante la menstruación, aunque no siempre, y otras drogas que disminuían el tamaño de los miomas, pero provocaban efectos secundarios semejantes a los que genera la menopausia, como sofocos de calor y osteoporosis”, detalló.
Fuente: Mirada Profesional